EL LEÓN DE NEMEA, UNO DE LOS 12 TRABAJOS DE HÉRCULES.

UN LEÓN ESPECIAL E INDESTRUCTIBLE

Rubens. 

Cuentan que Nemea sufrió un castigo por un sacrificio que prometieron y que no realizaron a los dioses. Las gentes de esta ciudad estaban siendo devoradas por un león enorme con una piel a prueba de hierro, bronce y piedra.

Hay quien dice que era hijo de Tifón, otros dicen que era hijo de la Quimera y la otra versión que Selene ( diosa Luna) lo parió con un estremecimiento tan espantoso que lo dejó caer en la Tierra cerca de Nemea, junto a una cueva de dos bocas.

Euristeo, el gran enemigo de Hércules, le impuso el trabajo de matar y desollar a esta fiera.

Cuando Hércules llegó a Nemea fue preguntando a la gente dónde podría encontrar al león, pero quedaba poca gente para que le orientase y tampoco encontraba rastros de la fiera.

Por un largo período el león había sido una fuerza destructiva y la gente era incapaz de hacer algo al respecto. Hércules encontró que la única manera en la cual podía lograr su objetivo, era perseguir al león en círculos cada vez más estrechos hasta que lo hubiera acorralado en la cueva. Procedió a hacer esto y le siguió la pista hasta su guarida.

 Hércules fue al monte Treto y allí lo divisó volviendo a su guarida salpicado de sangre de la matanza del día. Utilizó un arco con flechas que lanzadas contra él, rebotaban una tras otra en su espesa piel, sin causarle daño alguno. Hércules entonces utilizó la lanza, que se doblaba al chocar en la dura piel; la fiera se relamía y bostezaba. Entonces, fue a por su clava y enfrentándose a él, le dio un golpe con ella en el hocico, logrando que el león se sacudiese la cabeza y se metiese en la cueva, rompiéndose la clava de Hércules por el duro golpe que le atizó.

Hércules cubrió una de las entradas de la cueva con una red para impedir que la fiera pudiese salir y se metió por la otra, en busca del león y con sus propios brazos, lo atrapó por el cuello apretando con todas sus fuerzas hasta que lo mató. "Robert Graves. Los Mitos Griegos".

Esta escultura se encuentra en el Parque del Retiro, en Madrid.

Citamos aquí fragmentos de" Los 12 Trabajos de Hércules",  de Alice Bailey:

"Dos pensamientos sacados de la Biblia cristiana, resumen la lección de este trabajo. En la Epístola de San Pedro encontramos estas palabras: "Tu adversario, el demonio, como un león rugiente camina alrededor, buscando a quien poder devorar” y en La Revelación 5:5, encontramos las palabras, "He aquí, el León de la tribu de Judá la raíz de David, ha prevalecido para abrir el libro, y para desatar los siete sellos de éste".

Hércules, el aspirante, el alma, simboliza al león, el príncipe, el rey, el gobernante, y a causa de esto simbólicamente usaba la piel del león. El león de Nemea se yergue esencialmente para la coordinada, dominante personalidad, pues el aspirante tiene siempre que ser un individuo altamente evolucionado.

Por lo tanto, el león de Nemea simboliza la personalidad poderosa corrien­do indómita y amenazando la paz de la comarca. ¿Cuál es la lección que se pretende debe aprenderse del hecho de que Hércules siguiera al león hasta la cueva que tenía dos aberturas? ¿Por qué obstruyó una abertura y entró por la otra? ¿Cuál es la enseñanza espiritual que subyace en la tradición de que allí mató al león con sus simples manos desnudas?

Ha llegado el tiempo en que el león de la tribu de Judá debe vencer al león del yo personal. No estamos solos en nuestra lucha, como lo estuvo Hércules, sino que formamos parte de un gran grupo de dioses del sol, que están luchando con las pruebas preparatorias para la iniciación, y con los problemas que sacarán a la luz los plenos poderes del alma."

Zurbarán.